Ahorra dinero cada día con 6 sencillos trucos

Si hay algo que nos interesa conseguir en nuestro día a día es ahorrar más. Estamos de acuerdo en que lo ideal es hacer una planificación mensual y gastar en función de los objetivos marcados, pero a la hora de la verdad la mayoría de gente llega a fin de mes como buenamente puede. Para todos aquellos que penséis que la organización de las finanzas es una utopía, os traemos una alternativa: educar los hábitos de consumo. O dicho de otro modo: si no sabes organizar tu dinero, al menos aprende a no derrocharlo. En este post te damos 6 consejos para que empieces a ahorrar cada día sin darte cuenta. Toma nota, que vienen:

1. Haz la compra mensual

En las cestas diarias y semanales tendemos a introducir los alimentos que más nos apetecen en el momento y acabamos engrosando la cuenta final con productos innecesarios. Te aconsejamos que elabores una buena lista de la compra solo con aquello que realmente vayas a necesitar en un mes. Ahorrarás mucho haciendo un gasto único y vivirás más alejado de las tentaciones. Además, otro truco simplón pero muy efectivo es dirigirte al súper con el apetito saciado y los dientes recién lavados. Parece ser que hacemos una compra más selectiva cuando estamos sin hambre y con la boca bien limpia. ¡Así de fáciles somos de engañar!

2. Reduce el consumo en el hogar

Es inevitable tener que pagar el recibo de suministros, pero podemos aprender a sacarles el máximo partido y a reducir notablemente el consumo. Más allá de los básicos de no olvidar las luces encendidas e intentar acortar las duchas, deberíamos implementar trucos como el de aprovechar el calor de la calefacción apagándola al menos una hora antes de ir a dormir. También puedes recoger en un cubo el agua de la ducha hasta que esté caliente, o tapar siempre las ollas para que el agua hierva antes. Estas minucias marcan la diferencia y te convierten en una persona más respetuosa con el medioambiente.

3. Cuidado con los plazos

De entrada parecen una maravilla, pero si siempre acabas odiándolos es por algo. Intenta no volver a caer y paga siempre que puedas al contado. No solo estarás asegurándote de consumir aquello que realmente puedes permitirte en el momento, sino que evitarás cargar con intereses que acaban haciendo que desembolses de más. A veces merece la pena esperar, ahorrar una temporadita y enfrentarte al gasto cuando realmente eres capaz de asumirlo. 

4. Come en casa

Salir de bares y restaurantes es deporte nacional en este país (y con razón), pero no dejes que este tipo de ocio ponga en jaque mate a tu presupuesto. Reserva el fin de semana para darte el gusto y procura llevarte la comida hecha de casa cuando estés en la oficina. ¿Aún no conoces el batch cooking? Consiste en cocinar de golpe un montón de alimentos que puedes ir combinando en diferentes recetas a lo largo de la semana. Ahorrarás el dinero de comer fuera y el tiempo y la energía del cocinado. Todo ventajas, ya ves.

5. Desplázate de manera sostenible

¿Seguro que necesitas coger el coche o la moto para todo? Que lo hayas hecho toda la vida no significa que sea imprescindible. Quizás te sorprendas al revisar que puedes cambiar el asfixiante gasto de la gasolina por tarjetas de transporte público o, mejor aún, por un abono de servicio de bicicletas. El impacto de ahorro será brutal. Incluso podrás prescindir de la cuota del gimnasio cuando te hayas aficionado a desplazarte por la ciudad a golpe de pedal. De repente ahorrar parece la cosa más sensata del mundo, ¿no?

6. Usa la app de Goin

Si eres de esas personas que quiere mejorar su situación económica sin necesidad de renunciar a lo que más le gusta, deja que la app de Goin te facilite la vida ahorrando automáticamente y sin que te des cuenta. Retén pequeñas cantidades diarias o redondea el importe de tus compras al siguiente euro para que ahorres la diferencia. Si aún no conoces el resto de funcionalidades de Goin, descarga la app y échale un vistazo. Ya la usan más de 300.000 usuarios satisfechos.