El misterio del desabastecimiento de hielo
De nuevo estamos viviendo épocas de desabastecimiento de hielo. Entre ola y ola de calor, parece que los benditos cubitos no dan llegado, lo hacen por goteo o, sencillamente, no están. ¿Qué está pasando?
La realidad, sin que se disparen las alarmas, es que hay algunas razones para que falte hielo o que este suba tanto de precio. Te las explicamos en detalle, para evitar la preocupación y que tengas una respuesta a este misterio.
El misterio del desabastecimiento de hielo, explicado
La realidad es que el desabastecimiento de hielo no es algo nuevo. Ha sucedido en ocasiones anteriores, motivado por problemas en la cadena de suministro, huelgas, etc. Y suele pasar siempre en la misma época: verano.
¿Por qué? La razón es lógica: es la época del año en la que se producen más eventos, coincidiendo con un aumento increíble del consumo debido al calor. Sin embargo, esto no justificaría por sí misma la situación. ¿Acaso las empresas productoras de hielo no pueden tener esa previsión?
Un aumento espectacular de los costes de producción
El motivo de que haya desabastecimiento de hielo este año tiene mucho que ver con el aumento del coste de producirlo. La energía se ha disparado, afectando enormemente a la industria, que también se ve afectada por otros incrementos en el precio, como la gasolina.
Todo ello genera la tormenta perfecta para que las compañías que hacen los cubitos se piensen muy bien cómo, para quién y en qué cantidades producen. De lo contrario, la operación podría no salir rentable.
¿Tiene sentido perder dinero por trabajar? No. Y, sin embargo, es algo que hemos visto día sí y día también. El aumento de los costes de producción ha llevado a muchas empresas a parar las máquinas durante horas e incluso días en diferentes sectores. Los productores de hielo no son una excepción, y han de fabricar en aquellos momentos en los que sea rentable hacerlo.
El factor de las altas temperaturas
Por otra parte, no podemos ignorar el impacto de las olas de calor. Este verano hemos vivido altas temperaturas, que afectan a la producción, y que juegan su papel en el desabastecimiento de hielo.
Y es que no es lo mismo fabricar, transportar y conservar el hielo a 44 grados que a 33. Debido a esto, las cadenas y supermercados ponen sus propias condiciones de entrega para hacer el proceso más eficiente. En esas ventanas de tiempo hay una cantidad limitada que se puede hacer llegar a destino.
La tormenta perfecta para el desabastecimiento de hielo
En suma, el misterio de la falta de hielo se explica por la suma de todos esos factores. Como es lógico, la situación se normalizará con la bajada de la demanda. Sin embargo, como la gente se preocupa de que el hielo falte, aumenta el consumo, generando todavía más escasez.
La mejor solución, si tienes un congelador en casa, es poner a hacer algunos cubitos, aunque sólo sea por si acaso. Y no te preocupes: pronto retomaremos la gélida normalidad.